Ha sido galardonado con cinco premios Óscar, un premio Irving G. Thalberg, cinco premios Globo de Oro, un premio Screen Actors Guild Award y cinco premios People's Choice Awards además de otros numerosos premios internacionales. Su dilatada carrera cinematográfica se extiende de 1955 a la actualidad.
Cabe destacar que fue fuertemente influenciado por dos amigos que conoció en el campamento militar: David Janssen, que luego fue famoso por su papel como actor en la serie El fugitivo, y Martin Milner, que realizó otra serie titulada La vida de Ritley. Gracias a ellos logró un contrato con la Universal de 76 dólares semanales, garantizadas cuarenta semanas al año de trabajo en sus estudios. En esa época los grandes estudios tenían una política llamada del Star-system, con la que se encargaban de formar y pulir a las futuras estrellas.
Pero su gran salto a la fama fue en 1964, cuando Richard Harrison y James Coburn rechazaron el papel protagonista de Magnificent Stranger, de Sergio Leone, rodada en Almería. La película acabó titulándose Por un puñado de dólares. Anecdóticamente, Eastwood tuvo que aportar su propio vestuario, comprando el poncho que sería famoso en las siguientes películas de Sergio Leone.
Con los spaghetti westerns Por un puñado de dólares, La muerte tenía un precio (en Hispanoamérica Por unos dólares más) y El bueno, el feo y el malo, Clint Eastwood se embolsó la cifra de 270.000 dólares. Eastwood estampa en estos films su clásica figura de duro y sin piedad.
En 1968 creó su propia productora, The Malpaso Company (más tarde Malpaso Productions), con la que ha realizado todas sus películas desde entonces.
Pero su gran salto a la fama fue en 1964, cuando Richard Harrison y James Coburn rechazaron el papel protagonista de Magnificent Stranger, de Sergio Leone, rodada en Almería. La película acabó titulándose Por un puñado de dólares. Anecdóticamente, Eastwood tuvo que aportar su propio vestuario, comprando el poncho que sería famoso en las siguientes películas de Sergio Leone.
Con los spaghetti westerns Por un puñado de dólares, La muerte tenía un precio (en Hispanoamérica Por unos dólares más) y El bueno, el feo y el malo, Clint Eastwood se embolsó la cifra de 270.000 dólares. Eastwood estampa en estos films su clásica figura de duro y sin piedad.
En 1968 creó su propia productora, The Malpaso Company (más tarde Malpaso Productions), con la que ha realizado todas sus películas desde entonces.
No hay comentarios:
Publicar un comentario